200

200

domingo, 17 de diciembre de 2023

LAS HERIDAS DEL CORAZÓN NO SON MORTALES… TU CONSEJO FINANCIERO

 


Nadie puede escapar de ser herido, es una de las cosas que debemos vivir, cuando transitamos por este mundo y nos relacionamos con las personas. La herida nos invita a cambiar la percepción de los hechos y los paradigmas manejados.

Los sentimientos verdaderos tienen origen en el corazón.

 

¿Qué haces cuando se te cae una taza?

Las leyes del estrés y la velocidad con la que vivimos dictan que esa taza tienes que tirarla, algo impensable siglos atrás en Japón. Cuando una cosa se rompe hay que arreglarlo. Así surgió el kintsugi, un arte milenario que recompone las piezas rotas con barniz de resina mezclado con oro dejando como resultado una pieza todavía más bella que incluso nueva.

La filosofía japonesa vinculada al kintsugi nos ubica en una vida más humana-honesta, lejos de la perfección. Los fracasos, desengaños, la quiebra y las perdidas, son parte de transitar por este universo. En un mundo lleno de apariencias, escondemos muy bien nuestras heridas porque somos amantes la superioridad, colocándonos una máscara y sometiéndonos a un patrón de actuación frente a la sociedad. Adam Soboczynski (Escritor polaco) apunta en su libro “El arte de no decir la verdad” que hemos aprendido a camuflar con gran esfuerzo, y manteniendo la compostura, incluyendo las escalofriantes  conmociones que nos golpean.

Somos vulnerables no solo física, sino también psíquicamente. Cuando las adversidades nos superan, nos sentimos rotos. Las heridas como el rechazo, abandono, traición, la injusticia y la humillación deben ser trabajadas a nivel espiritual, por medio del autoconocimiento.

No hay recomposición ni resurgimiento sin paciencia. En el kintsugi, el proceso de secado es un factor determinante. La resina tarda semanas, a veces meses, en endurecerse. Es lo que garantiza su cohesión y durabilidad. Entre los cultivadores de la paciencia, Kafka (Franz Kafka (escritor de la República Checa)  ocupa un lugar privilegiado. Para él, la capacidad de saber sufrir y de tolerar infortunios era la clave para afrontar cualquier situación. El kintsugi nos enseña la resiliencia.

El significado de resiliencia, según la definición de la Real Academia Española de la Lengua (RAE) es la capacidad humana de asumir con flexibilidad situaciones límite y sobreponerse a ellas, pero la psicología agrega algo más al concepto de resiliencia: no sólo gracias a ella somos capaces de afrontar las crisis potencialmente traumáticas, sino que también podemos salir fortalecidos de ellas.

La resiliencia implica reestructurar nuestros recursos psicológicos en función de las nuevas perspectivas y a favor de nuestras necesidades. De esta manera, las personas resilientes no solo son capaces de sobreponerse a las adversidades que les ha tocado vivir, sino que van un paso más allá y utilizan esas situaciones para crecer y desarrollar al máximo su potencial. Para las personas resilientes no existe una vida dura, solo momentos difíciles.


Hábitos de una persona resilientes:

1-. Se conocen, son conscientes de sus potencialidades y limitaciones. Entienden sus fortalezas y los usan a su favor. Trabajan la inteligencia emocional.

2-. Son creativas. La persona con una alta capacidad de resiliencia no se limita a intentar pegar el jarrón roto, es consciente de que nunca volverá a ser el mismo. El resiliente hará un mosaico con los trozos rotos, y transformará su experiencia dolorosa en algo bello o útil. De lo vil, saca lo precioso.

3-. Se ama a sí misma.

4-. Reconocen el trabajo en equipo y no temen pedir ayuda. Cuando se enfrentan a una adversidad se preguntan: ¿Qué puedo aprender yo de esto?

5-. Mantienen el hábito de estar plenamente presentes, de vivir en el aquí y ahora. Tienen una gran capacidad de aceptación. Para estas personas el pasado forma parte del ayer y no es una fuente de culpabilidad y zozobra mientras que el futuro no les aturde con su cuota de incertidumbre y preocupaciones.

6-. Ven la vida con objetividad, pero siempre a través de un prisma optimista.

7-. Sueltan el control. Una de las principales fuentes de tensiones y estrés es el deseo de querer controlar todos los aspectos de nuestra vida. Por eso, cuando algo se nos escapa de entre las manos, nos sentimos culpables e inseguros.

8-. Son flexibles ante los cambios. Se adaptan. Modifican cuando es necesario.

9-. Son tenaces, perseveran.

10-. Afrontan la adversidad con humor. Una de las características esenciales de las personas resilientes es su sentido del humor, son capaces de reírse del infortunio y sacar una broma de sus desdichas.

 

Saber valorar lo que se rompe en nosotros nos aporta una serenidad objetiva. Apreciémonos como somos: rotos y nuevos, únicos, irreemplazables, en permanente cambio.

Contamos con tu apoyo, educación-gerencia- operatividad- sostenible – sustentable.

Proyecto educativo, impulsado desde Venezuela, con una nueva visión. 


APOYAESTEPROYECTO paypal.me/yelitzasalas25.

TALLER PARA SER TU MEJOR VERSIÓN



Podemos manejar las finanzas con sentido común.

Yelitza Salas

Redes: Twitter: @YOSEQUEHACER2_

Instragram: @paradigmanuevofinanciero 

Pago móvil Venezuela/Mercantil/Provincial 

Vía paypal/ Binance: Yelitzasalas25@gmail.com

https://www.blockchain.com/es/ - bc1qnhpreh9ceswwgk7rmz0fks558yeqtxwa8xrpy8



Proyectos productivos o privados.

Proyectos públicos o sociales.

Proyectos comunitarios.

Proyectos de vida.

Proyectos de investigación. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Entrada destacada

SOSTENIBILIDAD CORPORATIVA… TU CONSEJO FINANCIERO

  España ha dado un paso importante hacia la sostenibilidad corporativa con la aprobación de una nueva ley que obliga a grandes empresas y p...