Finanzas con sentido común / Common Sense Finance: " DESEMPLEADO empodérate”…TU CONSEJO FINANCIERO

El año 2020 concluyó con un total de 190,3 millones de personas sin trabajo, lo cual supone un incremento en aproximadamente 2.6 millones con respecto al año previo.

¿Cómo se siente un desempleado ?

1-. El desempleado sufre baja de autoestima.

2-. Los desempleados tienden a autoculpabilizarse, aunque su problema no sea individual sino colectivo y general.

3-. El desempleado, sobre todo cuando es de larga duración, suele percibirse a sí mismo como excluido social.

4-. El desempleado ve como se rebaja sus estatus, al no poder hacer cosas, acceder a determinado nivel de consumo, ocio, cobertura de necesidades básicas, a las que antes sí podía acceder.

5-. Pierde su cuantificación, deja de prepararse y actualizarse. Es un ser desmotivado.

CAMBIANDO paradigmas, el empleado es un esclavo, dependiente de que le digan lo que tiene que hacer y una vez que está libre, no sabe qué hacer es su libertad. Es como aquella persona pasa en la cárcel toda su vida, sale de allí y se ahorca. No soporta la libertad. Es crudo pero real. Aprenda a ver su desocupación como una señal, como una nueva oportunidad, es hora de cambiar la manera como se gana el sustento. Piense en el mañana, nada es seguro.

Empleo solo lo deberían buscar los jóvenes, después de cierta edad (para todos es diferente), solo quieres emprenden, son independientes y adquieren experiencia; es un camino muy duro, pero más permanente y seguro para el futuro. No estoy diciendo que una persona mayor, no puede trabajar en una empresa, pero que sea porque se requiere su presencia, gracias a sus conocimientos.

Analice los datos, vamos a revisar los números y usted decide si continua buscando empleo….

A más de un año y medio de que empezó la pandemia, la recuperación económica avanza en los 38 países que conforman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). La tasa de desempleo del área se situó en julio en el 6,2%, dos décimas menos con respecto a junio, según un informe publicado por el organismo internacional. La cifra, no obstante, aún está nueve décimas por encima del nivel de desempleo registrado en febrero de 2020, previo a la crisis sanitaria. Esperemos los datos nuevos al cierre del 2021.

El mayor descenso en la zona euro lo ha registrado España, donde la tasa de paro en julio fue del 14,3%, siete décimas menos respecto al mes anterior. Se trata de 192.000 personas menos en el paro. Pese a este buen indicador, el país sigue duplicando la media de la OCDE y se sitúa junto a Grecia (14,6%), como uno de los países con mayores tasas de desempleo. En total, para julio aún había 3,29 millones de españoles desempleados. Mantiene además una de las mayores tasas de paro juvenil, con un 35,1% frente al 12,5% de media.

En un cómputo global, el número de desempleados en los países de la OCDE pasó de 42,7 millones en junio a 41,1 millones en julio, lo que significa un descenso mensual de 1,6 millones. Japón y República Checa son los países que mantienen la tasa de paro más baja, con un 2,8%. El país asiático también es el que menor paro entre los jóvenes registra, con un 4,2%.

En la zona del euro, la tasa de desempleo descendió del 7,8% en junio al 7,6% en julio. Se trata de la tercera caída mensual consecutiva y el mejor dato desde febrero de 2020, cuando el paro fue de 7,4%. El conjunto de la Unión Europea también mejoró sus indicadores, al situarse en un 6,9% en julio, dos décimas menos que el mes anterior.

Pese al alentador panorama, los países de la OCDE se mantienen muy por encima de los 35,9 millones de desempleados registrados al cierre de 2019. De hecho, la organización internacional ha pedido prudencia con las interpretaciones de las cifras, pues se deben en gran medida a que miles de personas en EE UU y Canadá han vuelto a la normalidad en sus trabajos. A diferencia de lo que ocurre en Europa, estos países contabilizan como desempleados a aquellos que entran en un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE).

AMERICA

El Departamento de Trabajo de Estados Unidos informó este viernes (03.09.2021) que el índice de desempleo se redujo dos décimas en comparación con el mes anterior, llegando al 5,2 por ciento en agosto, el nivel más bajo desde que la pandemia del coronavirus impactó fuertemente el mercado laboral de la principal potencia económica del planeta.

La disminución estuvo dentro de los cálculos de los analistas teniendo en cuenta la reanudación de las actividades económicas, pese al resurgimiento de los contagios debido a la variante delta y a una ralentización en las tasas de vacunación. El mes pasado la economía añadió 235.000 empleos, muy lejos del millón 53 mil puestos de trabajo agregados en julio, y ha sido la cifra más baja en siete meses.

El sector privado registró un incremento de 243.000 empleos, comparados con los 798.000 añadidos en julio, mientras que el sector gubernamental perdió 8.000 en agosto. El número de nuevos puestos de trabajo de agosto está muy por debajo de las expectativas (los economistas esperaban 750.000) y podría indicar que la variante delta está afectando la recuperación económica.

Esta fuerte desaceleración en la creación de trabajos se produce, sin embargo, después de dos meses de fuerte crecimiento del empleo. La aparente dicotomía de una escasa generación de puestos y, a la vez, baja de la tasa de desempleo, se puede explicar por el hecho de que muchas personas han abandonado el mercado laboral y ya no buscan trabajo de forma activa.

América Latina y el Caribe "en terapia intensiva”

La tasa promedio de desocupación juvenil en América Latina y el Caribe alcanzó en el primer trimestre de 2021 el nivel más alto desde que se tiene registro, al llegar al 23,8 %, lo que implica que entre 2 y 3 millones de jóvenes quedaron por fuera de la fuerza laboral ante la falta de oportunidades por la pandemia.

Así lo reveló este jueves el director de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para América Latina y el Caribe, Vinícius Pinheiro.

Pinheiro detalló en un comunicado que la tasa de 23,8 % de desocupación juvenil en la región representa un aumento de 3 puntos porcentuales en comparación con el nivel registrado antes de la llegada del coronavirus. En paralelo, cayó cerca de 3 puntos porcentuales la tasa de participación laboral de los jóvenes entre 15 y 24 años, al situarse al 45,6 % en los primeros tres meses de 2021.

"GENERACIÓN DEL CONFINAMIENTO"

Ante este escenario, el director de la OIT para América Latina y el Caribe alertó del "desafío urgente" de los países de la región de tomar medidas para desactivar la "bomba del tiempo" representada por el legado de alto desempleo, informalidad y falta de oportunidades para los jóvenes que está dejando la crisis generada por la covid-19.

"La población joven está entre los que padecen con mayor intensidad las consecuencias sociales y económicas de la pandemia en la región, y harán frente a los efectos de la misma en los próximos años de su vida laboral, corriendo el riesgo de pasar a construir una generación del confinamiento", declaró Pinheiro.

Destacó que esta generación ha experimentado los impactos de la pandemia a través de "una multiplicidad de canales, tales como la interrupción de sus programas educativos o de formación y de puente hacia el mercado de trabajo, la pérdida de empleo y de ingresos, y la perspectiva de enfrentar mayores dificultades para encontrar una ocupación en el futuro".

AFRICA

De las 10 guerras activas en el mundo, solo 7 están en el continente Africano, esto es un dato importante para entender la crisis y la falta de datos.

La tasa de desempleo en Sudáfrica, la economía más desarrollada del continente africano, marcó un nuevo récord histórico en el último trimestre de 2020 y se situó en el 32,5 %, informó este martes el instituto oficial de estadísticas Stats SA.

Unos 7,2 millones de sudafricanos estuvieron desempleados entre octubre y diciembre de 2020, según Stats SA.

Eso supone un aumento de algo más de 701.000 desempleados que en el trimestre anterior y un incremento de la tasa de paro del 30,8 al 32,5 %.

Esta cifra, empujada por la crisis económica derivada de la pandemia de covid-19, representa un nuevo récord histórico para Sudáfrica, al menos desde que existen mediciones trimestrales del desempleo (2008).

El problema del mercado laboral es todavía mayor si se toma como referencia la tasa de paro "expandida" -que incluye a los trabajadores que no estuvieron buscando empleo activamente en ese periodo por la falta de perspectivas-, ya que ésta llega hasta el 42,6 % (apenas 0,5 puntos porcentuales menos que en el trimestre anterior).

Sudáfrica sí que creó más puestos de trabajo a finales de 2020 que en el trimestre precedente, pero aun así no fueron suficientes para absorber al porcentaje de personas que se incorporó a la búsqueda de trabajo.

AUSTRALIA

Según los datos publicados por la Oficina Australiana de Estadística, la tasa de desempleo se situó en julio en el 4.6%, tras situarse en el 4.9% el mes anterior y por debajo de las expectativas de los analistas, que esperaban que se situara en el 5%. El número de australianos que se incorporan a la población activa creció en 2.200, tras crecer en 29.100 el mes anterior. Los analistas preveían que se redujera en 46.200.

El número de trabajadores que se incorporan a la plantilla a tiempo completa se redujo en 4.200, tras aumentar en 51.600 el mes anterior. Por el contrario, el número de trabajadores que se incorporan a la fuerza de trabajo a tiempo parcial aumentó en 6.400 tras reducirse en 22.500. La tasa de participación se situó en el 66%, en línea con las expectativas de los analistas y tras situarse en el 66.2% el mes anterior.

A pesar de las buenas noticias, la Oficina Australiana de Estadística advirtió que esto no es necesariamente una señal de recuperación del mercado laboral, ya que la mayor parte de la mejora proviene de la disminución de la tasa de participación.

"La economía Australiana se mantiene resistente, con un desempleo que bajó al 4.6% en julio. Pero muchos lo están haciendo mal en el cierre, especialmente Nueva Gales del Sur, donde las horas trabajadas cayeron un 7%", comentó el tesorero nacional, Josh Frydenberg, en su cuenta de twitter. "Por eso el Gobierno de Morrison está respaldando a las empresas y a los individuos, con más de $3.1 billones en pagos por desastre a 1.4 millones de trabajadores".

Australia continúa luchando contra la propagación de la variante delta del Coronavirus, que está provocando un aumento significativo del número de infecciones. Desde el comienzo de la pandemia, se han notificado 41.521 casos de covid-19 en Australia, así como 972 muertes asociadas a ella, lo que la convierte en uno de los países menos afectados del mundo desarrollado.

Para combatir la propagación de la enfermedad, el gobierno ha decidido ampliar el bloqueo en Nueva Gales del Sur, lo que se considera una decisión muy controvertida dada la duración de las restricciones. El gobierno también está tratando de avanzar en una campaña de vacunación masiva muy ambiciosa. Hasta el momento, se han distribuido 15.9 millones de dosis entre la población local, mientras que 5.63 millones de personas están ya totalmente vacunadas, lo que supone alrededor del 22.2% de la población total.

Al terminar 2021 se habrán perdido 125 millones de empleos, con grandes diferencias entre los países pobres y ricos. La recuperación desigual estanca la actividad laboral, dice la agencia especializada en el trabajo, que atribuye el atraso del repunte en las naciones pobres a la falta de acceso a las vacunas y los estímulos fiscales.

De no implementarse una ayuda financiera y técnica para nivelar la recuperación del empleo tras la pandemia de COVID-19, se registrará una brecha aún más grande entre los mercados laborales de los países industrializados y las naciones en desarrollo, advirtió este miércoles la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Un nuevo estudio de ese organismo de la ONU señala que las disparidades entre las economías, que provocan un estancamiento en el repunte mundial, han empeorado las proyecciones de empleo hechas a inicios de 2021, que apuntaban a una pérdida de 3,5% de horas trabajadas, o cien millones de empleos de tiempo completo, con respecto a 2019.

Cambios en la estructura del empleo

La OIT explica que la pandemia propició un cambio en la estructura del empleo después de la pandemia:

Menos horas de trabajo.

Desaparición de pequeñas empresas.

Aumento del trabajo que no requiere presencia física.

Disminución del crédito y ayuda gubernamental para las pequeñas empresas.

Todos estos factores suponen un riesgo de periodos prolongados de inactividad y desempleo con baja productividad empresarial a largo plazo e índices pobres de desarrollo económico.

Reflexión ...

Un aspecto del proceso de reorganización social mundial ha sido, sin dudas, la destrucción de las viejas identidades, las viejas certezas, las viejas formas de lucha. Esta destrucción tomó muchas formas. Es el petrolero que de repente ya no es petrolero. Es el profesor universitario que de repente descubre que su trabajo es juntar papelitos. Es el niño o la niña que descubren que la niñez ya no es la misma, que ahora es más trabajo y miseria que juguetes y helados. Es el hombre desempleado que piensa que es menos 'hombre'. Es el adolescente que se encuentra en un nuevo mundo de inseguridad total. Es el comunista que ya no tiene la certeza del triunfo final. Es el trabajador que antes tenía una imagen clara del proletariado y que ya no sabe qué quiere decir. Es el argentino, el mexicano o el francés, que descubre que el concepto 'Argentina', 'México' o 'Francia' ya no tiene el mismo significado que antes. Globalización, flexibilización del trabajo, desempleo: todas las características del neoliberalismo son aspectos de la destrucción de un mundo que tenía o parecía tener ciertas reglas del juego, ciertos parámetros seguros, ciertas identidades. Por cierto, estas reglas del juego no eran el paraíso: eran aspectos de un modo de dominación, eran los parámetros de la opresión capitalista de la posguerra, los parámetros y luego los límites de la acumulación del capital. Eran expresiones de cierto equilibrio social, un equilibrio entre la subordinación y la insubordinación, un equilibrio que definía a ambas.

John Holloway sociólogo mexicano 1947